El oriundo de La Victoria se estrenó en 2010 con grand slam ante Lino Urdaneta, quien no tuvo un feliz debut con los Navegantes del Magallanes. El bambinazo se convirtió en proeza pues ningún criollo había hecho algo similar en la pelota rentada nacional.
Conectar un grand slam en el primer envío que ves en la temporada es una de las hazañas atípicas que ocurren en la fecha inaugural de un torneo profesional. Así sucedió hace tres noches, en la primera jornada de nuestra pelota, fecha en la que Alexis Espinoza ingresó a los libros de historia del béisbol venezolano al convertirse en apenas el tercer pelotero que despacha un cuadrangular con las bases llenas en el día inicial del campeonato, en ese grupo es el primer criollo.
Espinoza ingresó como emergente, luego de un pelotazo que recibió el jardinero Reggie Taylor, quien por precaución fue retirado del encuentro que Caribes de Anzoátegui disputó ante los Navegantes del Magallanes. El patrullero venezolano descifró una recta en la esquina de afuera de Lino Urdaneta, quien debutaba con los filibusteros tras ser dejado en libertad por la tribu en septiembre. Tras el estacazo, el guardabosque aragüeño emuló a U.L Washington (1979) y Tito Landrum (1981), únicos paleadores en conectar grand slam en el inicio del campeonato invernal.
“Es extraño que ocurra algo así, cuando apenas está empezando la temporada”, admitió Espinoza antes del segundo encuentro de Caribes de Anzoátegui. “Estamos viendo los frutos de un intenso trabajo que realizamos durante los entrenamientos. Fuimos los primeros en iniciar la pre-temporada, junto con Magallanes, y ahí tuve la oportunidad de jugar a diario, tomar prácticas de bateo adicionales, con el hitting coach y ahí están los resultados”.
“Urdaneta dejó el pitcheo un poco alta y la pude conectar bien”, añadió.
El bambinazo de Espinoza fue parte de una amplia ofensiva que desplegó el elenco de Julio Franco ante Magallanes. Nunca antes un equipo había anotado 16 carreras en el primer juego del campeonato, al tiempo que se impuso un nuevo récord de 20 hits para la novena oriental. Los portocruzanos siguieron la fiesta en el estadio Universitario, hace dos noches, cuando anotaron siete rayitas y conectaron 10 indiscutibles más.
Un inicio alentador para un equipo que tiene dos años finalizando en la última casilla del béisbol venezolano.
“(Julio) Franco ha sido un gran motivador, conoce el juego y tiene una gran noción desde el inicio del partido”, reflexionó Espinoza. “Su experiencia ha sido de gran ayuda para nosotros, ya que se ha sentado con todos para conversar y brindarnos confianza para afrontar la temporada”.
“Esperemos que todo termine como ha comenzado”, finalizó
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